Esta llamativa ave es originaria de África (zona de Etiopia) y alcanza un tamaño de 42 a 43 cm.
Tiene plumaje verde brillante, con una cresta oscura sobre la cabeza, que puede erizar a voluntad, las coberteras de las alas son azules al igual que la cola, mientras que las primarias son de color rojo intenso, y en general sólo se aprecian con el ave en vuelo. El pico es rojo anaranjado, al igual que el anillo que bordea los ojos. Por delante del ojo lucen «mejillas blancas» y dos marcas oblicuas también blancas en el cuello.
Tiene otras varias características anatómicas de interés. En primer lugar, tienen pies fuertes y puede girar su cuarto dedo del pie hacia delante o hacia atrás para conseguir un mejor agarre en su percha. En segundo lugar, los pollos de esta especie tienen garras en sus alas, una característica anatómica extraña y evocadora para un pájaro que casi parece recordar a su primo antiguo, el Archaeopteryx. Los polluelos se desprenden de estas garras en el momento de abandonar el nido.
Esta ave africana hermosa y llena de energía es un muy popular en los Estados Unidos y en el Reino Unido, incluso pueden ser alimentados a mano por lo que llegan a ser mascotas muy mansas.
La mayoría de estas aves tiene el plumaje verde y es el resultado de una combinación de una coloración estructural y pigmentos. Son únicos ya que sólo los Turacos, entre todas las aves, producen un pigmento verde, turacoverdin, que es el color de sus plumas.
Otra curiosidad y una de las cosas por lo que este pájaro llama la atención es por su canto, el cual, se parece al chillido de un mono salvaje.