Según un comunicado del instituto armado, el perro superviviente, de raza podenco, al igual que uno de los dos que se hallaron muertos, ha sido depositado en el Albergue de Bañaderos.
El Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil en Guía inició la investigación de estos hechos tras tener conocimiento de que en una perrera del paraje conocido como Camino de la Cañada, en Agaete, se pudieran encontrar varios perros en mal estado.
Efectivos del cuerpo comprobaron la existencia de dos cobertizos de los que emanaban un fuerte olor a putrefacción y carentes de toda salubridad e higiene, en uno de los cuales estaban los dos podencos, uno vivo pero en un estado de extrema delgadez presumiblemente por desnutrición, ya que no había restos de comida y agua alrededor, y el cadáver del otro.
Este último presentaba una delgadez extrema y observándose varias mordidas con falta de carne, clara muestra de haber sido devorado parcialmente por el primer animal, según la nota de la Guardia Civil, que también halló otro perro fallecido de raza bóxer.
La causa de la muerte de ambos perros supuestamente es la inanición, ya que se contó con la colaboración de la Facultad de Veterinaria de la Universidad de Las Palmas, cuyo servicio de diagnóstico anatomopatológico practicó la necropsia a los perros fallecidos.
EFE